diario 2

diario 1

AIR

 

el diario siguiente: on the road

 


día 78 -viernes 24: el regreso y el fin

fin fin fin fin fin


día 77 - jueves 23
la gente no cesa de pasear por estas calles, día y noche, todo el tiempo. Se muestra feliz, loca, gozosa. No importa el frío ni la lluvia. Los pubs repletos. Guinnessland. 

Hay otra Irlanda allá afuera. Verde y rural. Con manantiales sagrados y una historia confundida por el famoso san patricio, que orgullosamente clamó haber desaparecido todas las serpientes de esta tierra. Brigit es convertida en santa y todos sus ritos disfrazados. El museo muestra bellezas celtas, vikingas y, sobre todo esas poderosas Sheela-na-nigs, esculturas en piedra de mujeres que se abren el sexo con las manos para mostrarnos de donde venimos.

mañana me voy de regreso a México. hoy veo lo más que puedo. Es una pena para mi no haber podido ir a Newgrange. Pero ya será en la próxima.


día 76- miércoles 22
kells: ver pata de perro
día 75 -martes 21
Ah! Dublín. Esta Irlanda independizada no hace ni 100 años y que ahora, como país miembro de la UE, goza de una inyección de fondos que pareciera que florece, pero, según los informes recibidos, hace de Dublin, especialmente, un centro de atracción turística basado en la Guinness (deliciosa), el güisqui y la vida nocturna. The luck of the irish.

Parece UK, pero tiene sus peculiaridades que la distinguen. Voy al museo de arte moderno, camino al lado del río, por las callejuelas del Temple Bar, que es no un pub sino un barrio, el más antiguo. Claro, lleno de pubs.

 

 


día 74 -lunes 20
Después de una buena y divertida noche con Sue Williams y su amiga Kate con vino y pizzas, me dispongo para la entrevista en el Instituto de Bellas Artes de la Universidad de Cardiff. De ella depende que pueda concretarse el realizar la maestría. Al recibir la invitación de parte de Paul Beauchamp, quien tuvo que retirarse por motivos del corazón (y no sentimentales), me queda la duda si quienes están ahora a cargo tendrán el mismo interés. Quieren saber quién soy, qué hago, porqué lo hago, etc. Preparé una presentación que contiene el trabajo de unter rot para mostrarles.

    

La entrevista es un éxito. Ellos buscan el sustento teórico tanto como la práctica y parecen quedar bastante satisfechos, ya que me dicen que por supuesto tengo un lugar y que además seré de provecho para todo el programa. Qué chido. Ahora me tocará conseguir los fondos.

Después de caminar Cardiff un rato, al aereopuerto, hacia Dublin. El fin se acerca.


día 73 -domingo 19
 

 

Es tiempo de partir. Ay! una vez más en movimiento, otro aeropuerto, otro aire, otra temperatura, otro idioma. 

Antes, Chipi y Marta me llevan al parque que está detrás de su casa y ahí encuentro ese viejo roble maravilloso, sobreviviente de la urbanización que se ha montado en un muro. Y me maravilla que lo hayan respetado. Ahora abraza una de sus ramas una cinta roja que recuerda la sangre de las mujeres, la vida que esa sangre significa.

Ahora veré el camino de día, un amarillo genista cubre la tierra, las flores de la mimosa hacen el viaje muy dulce. Habrá que volver.


día 72 -sábado 18
 

día de cierre, de hacer lo que falta. Un mechón azul, fotos con uno de los espectaculares, y una serie que le tomo a Nieves paloteando, haciendo bolillo, ese encaje fino y laborioso que se viene haciendo -seguro- desde el medioevo. Ah! las mujeres!

 


día 71 - viernes 17

y llega el gran día. Nos la hemos pasado pegando carteles por toda la ciudad, haciendo entrevistas, checando los detalles en el ayuntamiento y el auditorio. La verdad Martazulita ha hecho un gran trabajo: el consejero de cultura nos hizo los carteles, dípticos, unos espectaculares....bien, muy bien.

   

la presentación es chida, aunque llueve y llueve. Incluso somos, por primera vez, 4 artistas participantes los que estamos presentes, porque llegan Petra y Carlos mis mejores deseos para ellos. Y como estos niños no beben ni son de vida nocturna, nos vamos a la casa, con la María Marticorena, que nos hace reír mucho.


día 70 -jueves 16 - 

en el camino de Santiago (ver pata de perro)


día 69 -jueves 15
y por supuesto que me trataron de lujo. Nieves es una excelente cocinera y me agasajó de verdad. Esas comidas en su casa son y serán memorables....mmmmmhhhhhhh......

peces, peces de ciudad, peces inmensos de cabeza, enseñando las colas tiesas asomando, como si todos escucharan un extraño llamado desde el fondo del camión que los transporta. Peces de ciudad recién pescados en el mar ahí namás, con sus grandes bocas, sus cuerpos blandos, sus tentáculos chorreantes.

prefiero los peces en el plato.


día 68 -miércoles 14
en Santiago me esperan Marta, Nieves, su madre, y Manolo, su padre. Debo decir que llego casi a las 2 de la mañana. Del frío al calor, amor mío, de -2 a 20ºC. De norte a Sur, de Este a Oeste. Si soy un poco extremosa ya saben entonces porqué.

 El recorrido hasta Vilagarcía de Arousa está salpicado de informaciones y anécdotas sobre el lugar. Aquí nació fulanito el escritor, en este pueblo se hacen las luchas de barcos vikingos(!!!!!), allá está la cruz de Santa Rita, que se escapó del monasterio por un túnel y fue a aparecer en la cima de ese cerro.... de esta ría se extrae el mejor marisco de toda Galicia, que es decir del mundo.

Al otro día la primera caminata, siguiendo a la azul de Marta. Impresionante estar bajo el sol, entre camelias floridas, en un mundo totalmente distinto al que dejé en Stuttgart.

Fuimos a su taller también, donde da clases y pinta. Ahí se tomó su prueba de sangre. Siendo diabética los cuidados que debe tener son muy excesivos. Pero ese día la azúcar la tenía muy bien.


día 67 - marzo 13
Stuttgart..... me voy a Galicia e Inge me lleva al aeropuerto, pero antes paseamos por el centro de la ciudad. Ella busca un extrusor de spätzle para que me lleve y no lo encuentra. Que bien, ya llevo muchas cosas, pero ella me promete enviarlo port correo. Espero que con mi móvil, que dejé en casa de Heni. De hoy en adelante, la desconexión será también así.

  

Capital de Baden-Wüttenberg, Stuttgart es, en su centro comercial, igual que todas las capitales europeas: una gran avenida peatonal llena de tiendas.... claro que tiene mucho más, una galería super chida, artistas organizados, universidades, una vida muy activa y rica... pero al llegar a esa calle vi todas las otras en ella: Cardiff incluso. 

pero es tiempo de tomar el avión y volar a Santiago de Compostela con una escala larga y tediosa en Madrid. Es loco como estando tan relativamente cerca, necesito casi 12 horas para llegar a Galicia, con Martazul. Me despido de la queridísima Inge y del idioma alemán, que en estos 2 meses y medio he logrado entender bastante (digo, es un decir).


día 66 - marzo 12 -la gran nevada (pata de perro)
día 65 -marzo 11

Desayuno con Rolf, mi enlace con Zell y mi amigo desde hace casi 20 años. Un día llegó a mi puerta junto con su novia Elizabeth y me enseñó a hacer honig küchen, el pastel de miel que hago cada fin de año. Una delicia. No lo volví a ver hasta el 2002, en que vine a dar la conferencia en el Keramik Westerwald Museum. Esta vez él anda muy líado con su museele(.de), conferencias y viajes a Berlín. Me pide que lo acompañe a Tübingen a hacer una tour fotográfica de los sitios claves de la psiquiatría en esa ciudad, para utilizar las fotos en su ponencia para un próximo congreso. vale, me encanta la idea. Después iremos al museo Ritter del chocolate.

Tübingen es hermoso (ver la pata de perro correspondiente); cruzado por el río Neckar, es un pueblo con arquitectura del 1600, una historia literaria (aquí vivió y aquí vomitó Goethe, aquí enloqueció Hölderlin), siquiatrica (desde el viejo manicomio hasta la casa donde Alzhaimer descubrió la enfermedad del olvido). Historia de guerras de cientos de años, con la fosa común cavada por los nazis, y también historia del conocimiento, con una de las universidades más viejas y prestigiadas, y, by the way, un feminismo firme y fuerte. 

Después del recorrido fuimos por unos sus amigos para ir al museo Ritter, con una historia del chocolate ritter y una tienda, claro. Además, la familia tiene tanto dinero que ha construido un ala dedicada a arte contemporáneo cuadrado...si, todo gira alrededor del cuadrado, como los chocolates que fabrican, cuadrados. Y debo decir que tienen buena obra.


día 64 - marzo 10
es viernes. Me paso toda la mañana con Heni, me habla de sus viajes a Sri Lanka, y nos detenemos a analizar el porqué nos es cada vez más difícil regresar a la vida real. no importa si es Alemania o México, es terminar una vida de sueño para despertar. Es perder libertad. Viajar entre los mundos nos anuda de una forma que nuestro ser pertenece a  ellos. Como si nuestro cuerpo de ensueño no alcanzara a regresar completo y jirones del ser se quedaran atorados en los árboles de los otros mundos. Rasgadas quedamos, divididas. Y eso, claro, duele.

Pero por lo pronto mi realidad es ésta: Zell u.A. Inge y Jan, a quienes conozco ya desde el 2002. El maldito frio y la hermosísima -aún- nieve. El comer tarde, el tomar mucho vino, el ser la invitada privilegiada a atestiguar otras vidas, otras realidades. 

y me sitúo en el "que tal si esta fuera mi vida real?" mi cotidianeidad? Si las calles que transito no alojaran los venenos despedidos por aquellos que se niegan a la verificación por temor a perder su machismo y el cruzarlas no fuera peligro de muerte o intoxicación.. si simplemente viviera en esta casa con Inge y su familia y juntas pudiéramos ir cada semana a nadar a la alberca termal. Y me doy cuenta de que eso es el aquí y ahora tan famoso. Es mi vida real.

      


día 63 -marzo 9
las queremos vivas: el lebensbaum (árbol de la vida) en Rechberghausen

Llovió ayer. Una llovizna que duró toda la noche y que disolvió la nieve. El paisaje cambió, literalmente, de la noche a la mañana. La tierra recobra su verde, la sensación espacial es otra. Como si todo volviera a su lugar.

  

Es día de llevar la acción a Rechberghausen. Bandas rojas atadas a un nogal. La gente me ayuda, la periodista se involucra, los niños quieren hablar del caso en su escuela. las queremos vidas. Ya basta de muerte, queremos vida.

por la noche Inge y yo vamos a un baño termal en Bad Boll. Relajante, necesario....


día 62 - marzo 8 - international frauentag
honrando a todas las mujeres que me han acompañado durante este viaje:


día 61 - marzo 7

el viejo Zell.... mi tercera vez en este pueblo que parece de chocolate, con merengue ahora. Las mismas personas conocidas, en las que puedo ver el paso del tiempo, como en Rolf, las que parece que fue ayer, como Abram o Inge. Los mismos lugares, como la panadería, o la bomba de agua ahora congelada. ES muy rico poder experimentar un mismo lugar de diferentes maneras. Como el no quedarme en casa de Rolf sino repartirme entre Inge -donde paso la mayor parte del tiempo- y Heni, donde duermo. Una trabaja en el hospital siquiátrico -uno de los centros de actividad de Göppingen- con unos horarios distintos cada día. La otra acaba de sufrir una cirugía bucal. Una vive con tres hombres, Wolfgang, su pareja, Jan, su hijo y Tobías, hijo de una amiga. Los tres viven conectados a la computadora. La otra vive sola.

  

Estar en tantas diversas casas de otras mujeres me permite asomarme a su manera de vivir. Su relación con el entorno, con su espacio. Sus intereses, sus -incluso- manías. Es una oportunidad que agradezco.


día 60 - marzo 6
cumpleaños 50 de Suizanna - rumbo a Alemania

tempranito, a las 7.30, vamos a la Brasserie del complejo habitacional este a celebrar el cumple de S. Café, pan y amistades. Ella tiene que trabajar hoy, pero en la noche s va a Scuol a pasar una semana esquiando. Me ayuda a llevar mis cosas a la estación y a las 11 me subo al tren rumbo a Stuttgart.

Cruzar la frontera, cambiar de país, es tan fácil! Aunque ahora hay policías que piden el pasaporte, cosa que antes no sucedía.

En Göppingen espero a Inge en el pequeño bar turco que hay en la estación. Me tomo media cerveza, que me cuesta un euro y el hombre que atiende posa para mi, mientras rasura este döner, supongo el trompo de carne al pastor original, que es de carnero, no de cerdo.

Inge llega por mi para ir a Zell. Sigue nevando, la gente aquí ya está harta. El paisaje que conozco verde ahora es uniformemente blanco. La Aichberg, el cerrito que ellos llaman montaña, muestra su calva blanca. Me da gusto volver a Zell por tercera vez.  

Le cuento a Inge mis cuitas, mis proyectos, las ganas de hacer una vez más la acción del árbol por el día de la Mujer. Ella se pone a trabajar de inmediato. Es excelente organizadora, mi agente alemana....llama a Rechberghausen. El jueves 9 realizaré la acción ahí, con el apoyo del Rathaus, cosa que no era necesaría pero si es útil, al involucrar a los gobiernos en el conocimiento del caso Cd. Juárez, en el caso generalizado de la violencia contra las mujeres. Super!


día 59 - marzo 5

40 horas de nevada, 40 centímetros de nieve en la ciudad. 

Vistas desde mi ventana antes y después:

    

  

Pero a medio día sale el sol y nosotras a caminar. Después de la hora de silencio a lo largo del río Limmatz, una luz muy brillante, un paisaje nunca visto -ni por mi ni por S- pasamos por un campo de futbol y S me enseña como hacer una ángela de nieve.... En casa hacemos la Talk piece, que luego subiré en su sitio adecuado, que aún no existe

   

esta nevadita parece que más bien fue una catástrofe, como aquí la llamaron, y veo que me está tocando ser testiga de fenómenos naturales excepcionales: el Donau congelado (que por cierto este río es femenino, es la Donau, así como el Rhin es masculino), la nevada ésta....espero que ya no más! por el bien de todas y todos...

¿querías nieve, mi amor?


día 58 - marzo 4

Amanece nevando. El cielo azul de ayer se convierte en gris, casi blanco. S y yo caminamos una hora sin hablar bajo la nieve, rumbo a la Rote Fabrik, donde hay una expo llamada Colonialismo sin Colonias? y donde me encuentro unas mantas pintadas por Minerva Cuevas, reproduciendo algunas imágenes de aguas de la nestlé, que es dueña de una buena parte de los manantiales del mundo...desgraciados. Nestlé es suiza, com knorr...

Pero antes vemos una colección de plantas que vienen de África y Latinoamérica, sus corazones de cacto, sus suculentas, sus euphorbias....unas verdaderas maravillas. Muy en casa, con la nieve cayendo a raudales afuera.

  

en el camino a la rote fabrik me encuentro un grupito de abedules. Ahí me detengo, quiero dejar un mensaje por las mujeres.

al salir de la fábrica roja, mundo del graffiti, la nieve es tanta que no la crees. S se queja: en marzo!


día 57 - marzo 3

Suzanna se va al trabajo, pero hoy sale temprano. Yo salgo a caminar una hora antes de nuestra cita, para así retomar el proyecto de Mun Leng, porque es difícil dejar se hacerlo. Quedé con ella de que así lo haríamos, y al subirlo a la red, intercambiamos información y aunamos visiones. Es entonces que camino de 11 a 12 por la hardtrumstrasse, y aprovecho para pegar un cartel también. Estoy fuera del museo Migros (Migros poseé todo Zurich, parece. Balnearios, museos -varios-, supermercados, bancos....)y mi amiga llega a las 12 justas.

y a ver arte. Una expo colectiva multimedia. Algunas cosas interesantes, otras muy jaladas de los pelos, unas más como jueguitos para Papalote (el museo del niño)....que difícil hacer uso de las nuevas tecnologías dentro del arte sin parecer gameboy.

esta obra, o parte de, se llama Love Junky, y la verdad, no se el nombre de la artista.

     

Caminar Zürich, colocra posters, comprar el boleto para Zell, saludar a la ángela de Nikki de Phalle, fue mi día en esta ciudad tan llena de migrantes y de dinero.


día 56 - marzo 2

 Zürich

es una mañana lenta, pero Fátima me llama y me da a escoger, quiero ir al Kunsthaus o al sauna. Opto por este último, claro. A medio día la encuentro y vamos al centro de la ciudad, muy cerca de la plaza donde están los banqueros, el dinero del mundo, la lavandería más grande de todas. Nieva un poco, no hace mucho frío. Contrario a lo que puede pensarse, el lugar no es tan exclusivo, es de Migros, una empresa cooperativa, según Suzanna. Ella es socia, también Fátima. No se como trabaja Migros, pero a mí me sale gratis.

Fátima trabaja con mujeres, lo ha hecho por años. Y es, como Ana en Viena, referente para las nuevas migrantes. Ahora busca trabajo de traductora, pero siempre dentro del mismo ámbito -cuestión de enlaces. 

en el balneario vamos a una alberca salada, 38º, con distintos chorros de agua relajantes.... ahhhh, que bien, mi cuerpo necesita su apapacho y el agua es un método maravilloso. DEspués no al sauna tradicional, seco, sino a uno que me recuerda más un temazcal, porque no llega a ser baño de vapor. Qué regodeos. Estamos ahí por tres horas, qué más apapacho.... ah! los relojitos son chips que nos permiten usar los lockers. Adiós llaves.  

De regreso en casa de Suizanna. Cocino verduras, juego con el toro, y ella recupera su español....

 

      


día 55 - marzo 1º 

el viaje transalpino

A las 9.20 tomo el tren a Zürich. Ana me lleva a la estación (para asegurarse de que me voy, dijo). La verdad que ella y Helmut fueron una bendición, me acogieron con gran generosidad durante todos esos días en la ciudad que celebra los 250 años mozartianos. Es una madre por vocación, que, como muchas, reniega a la vez que da. Y su pareja es envidiable. Nunca perfecta, que nada lo es, pero bastante entrañable, según pude ver. Me gustan esos dos.

Ahora en el tren, a cruzar Austria a lo largo: Salzburgo, Innsbruck, los Alpes. Paisajes bellísimos. Mi compañía es una vienesa que se va tres semanas a un bad (very good bad, aguas termales cerca de Salsburgo, un ingeniero, Gottfried, que va a la frontera a presentar su libro y que estuvo seis meses en Kuala Lupur construyendo los cimientos de las torres gemelas de Malasia, y, ya en Suiza y después de pasar revista con la policía migratoria, una señora ya grande con la cual me aventuré a hablarle en alemán. Bella ella. 

       

     

al llegar a Zürich me encuentro con la Suizannita. Cambio unos euros por francos. Me necantan estos billetes, tan coloridos y con la imagen de sus grandes contemporáneos, como Curvosier.

nos subimos (con trabajos) en el tram 4, viejo conocido. Hay mucha gente y el viento se lleva un papel que se escapa de la carpeta que compré en Viena para transportar las fotos....es el dibujo de Helmut, ay.

adentro me encuentro con que no se permiten mexicanos cancioneros, entre otras cosas. Suzanna de inmediato me dice que eso está por quitarse, porque todo mundo protestó....vaya la famita!

Al llegar e instalarme subimos a la azotea, que hoy hay reunión del Circolo, que reúne a los vecinos del kraftwerk cada mes a cenar. Me doy cuenta de cuánta gente -suiza- habla español. Lo prefieren al inglés. Además veo caras conocidas, como la de Fátima, la brasileña, con quien quedo de salir mañana.

ahhhh, la camita!


día 54 - febrero 28

  Voy a casa de Claudia a ver su última obra, una serie de fondos (de mujer) bordados con escenas eróticas chinas y el video que le hizo Freddy, ambas muy chidas. Después me acompaña a la embajada, a llevar las cartas que se firmaron exigiendo solución al "asunto Juárez". Se que no servirá de nada, pero al menos se hace hincapié en que existen gentes en un lugar como Vienna que saben, se indignan, se duelen de esas infames muertes. En unos días llega Fox por estas tierras..... debería de recibirlas entonces.

Después caminamos por los alrededores de la embajada (en Opernstrasse) visitando las galerías que hay por ahí sin encintrar nada que valiera la pena hasta la Fundación Generali, donde hay una expo sobre el cine bastante buena. Nos vamos a tomar un prosecco al bar del Kunsthalle donde está la obra de Stephan Cohen, quien explota todas sus características con gran éxito: es homosexual, judío, blanco y sudafricano. Nos despedimos en el U bahn. Tal vez nos veamos pronto en Morelia.

Camino una vez más por la Mariahilferstrasse.

A las seis llega Sheida, y luego Sabine, que regresa de Krems. Nos llegamos a querer en este tiempo. Gracias a ella, en principio, Krems no fue páramo humano. Ahora me trae la foto que salió publicada en el NÖN, semanario de la Nieder Österreich, donde estamos ella, Mun Leng,y yo bajo el árbol. Le doy la llave del buzón y un mapa de los que me dieron en la embajada. 

Se acaba el tiempo, mi último día en Viena.

 

       


día 53 - febrero 27 

Nieva en Vienna. 

Hago un paquete con los libros y catálogos para mandarlos por correo. NO quiero cargarlos por toda Europa. Ana tiene una balanza así que peso mi equipaje. Los libros son 5 kilos, la maleta que Lee Kwang decía que eran casi 40 kilos son 15. Helmut quiere que conozca su estudio, que está cerca del correo, así que vamos los tres. Tiene un buen lugar atiborrado de obra. Me muestra lo último de su producción y habla de las técnicas que emplea. Me regala un dibujo de una serie, y queda un hueco:

Me quedo de ver con Claudia en el Museum Quartier, donde corre un viento muy fuerte. La foto de Marylin se empaña. me encanta la nieve. 

Vamos a comer kebab y tomar una cerveza. Hablamos, hacemos planes. Llevar su proyecto Re-affiliations a Morelia. Una expo de mujeres que cada vez que pasa por un país va -como imán- atrayéndose más artistas. Sería interesante en verdad llevarla al MACAZ y hacer la curaduría. Quedamos de vernos mañana antes de la partida definitiva.

      

Después paseo sola. Me gusta conocer y reconocer. Es fácil andar por estas calles, en el metro. Regreso a rehacer maletas (los libros dejaron espacio, también), y a las 7 vamos a casa del Erich a cenar. Es curiosa esta cena, este encuentro con quien desde el inicio dice que me va a comprar obra. De hecho, el 22 me dijo cuál y por eso organizó la cena. Yo le llevo la foto elegida, pero él no hace mención alguna a la compra. Yo espero. Se porta de lo más patán durante la cena. Trata a su mujer -schiatzi- como buen machín, hace chistes racistas y en- contra-de-ellas, habla todo el tiempo en alemán, siendo que habla inglés, hasta que le pido que no me deje fuera de la conversación. Igual es insulsa. Al final, me regala dos botellas y una camiseta de su negocio. Sigue haciendo chistes idiotas (úsala cuando limpies tu casa), y aprovechando que me da pie hablando de facturas (y mandamos la factura a alguien más, le cobro 1000, te pago 200...) y  es cuando le cobro. Y resulta que se enoja! Sin embargo me paga los 300 €. Pensaba acaso que yo -después de toda su actuación, le regalaría una obra? Creía que se podía burlar de una mujer que habla sobre la violencia contra las mujeres??? ja!

ja !

ja !